RoomBox

Rediseñamos, de local a… ¡coworking de estilo industrial!

En 2021 la vuelta al trabajo ha estado condicionada inevitablemente por el Coronavirus, el cual nos ha obligado a adaptarnos a las circunstancias de manera vertiginosa.

Existen varios estudios que afirman que el modelo de coworking se triplicará durante los primeros meses del 2022. El interiorismo y la flexibilidad exprimen su potencial en las nuevas oficinas. Las oficinas apuestan por los espacios colaborativos, salas para reunirse y/o relajarse en estancias amplias que promuevan el trabajo en equipo.

Tras el periodo de pandemia se ha visto como ha habido un deseo de renovación y de decorar espacios tanto en hogares como en oficinas de trabajo, ya que estos últimos son como nuestro segundo hogar. De forma acelerada hemos ido cambiando y adaptándonos desde el teletrabajo a la vuelta parcial o total a las oficinas, las cuales, también han cambiado.

De la tendencia a la rutina

Ahora esos cambios son tendencia y se han normalizado como parte de nuestras vidas, tanto personales como laborales. El cambio apuesta por el minimalismo la calidez y lo acogedor.

Los coworking y las oficinas híbridas han sido y serán los nuevos espacios de trabajo. Como tendencia el estilo industrial es el que destaca por excelencia y practicidad para ambos casos.

coworking table
Foto de Andrew Neel en Pexels

Lo mejor sería ir en sintonía con nuestro entorno y circunstancias, así pues el trabajo híbrido y los coworking también se han adaptado sin dejar de lado el diseño, las tendencias y la decoración. Por supuesto, haciendo hincapié en la funcionalidad y eficiencia de los espacios polivalentes, pues es donde pasamos el mayor tiempo de nuestro día a día.

Incluso, se han habilitado viviendas, locales u hoteles como oficinas, y es aquí donde vamos a ver cómo podemos convertir y adaptar una vivienda, por pequeña que sea a una oficina o coworking. 

El estilo industrial

Este estilo es conocido y se asocia a una fábrica (como su propio nombre indica), a un garaje o nave industrial. Se caracteriza por la presencia de espacios amplios, fríos, polivalentes y multifuncionales que han pasado de ser moda a tendencia y han llegado para quedarse.

Las paredes de cemento o ladrillo son características de este estilo industrial, ya que deja lo que hay a la vista, sin recargar las paredes y descubriendo esa sensación de espacio. También los muebles de metal y madera se asocian a este estilo, en general mobiliario de gran tamaño y espacioso a la vez que minimalista y funcional.

coworking window
Foto de Andrea Piacquadio en Pexels

Se trata de un diseño simple, sencillo y transparente. La decoración prima la función dando protagonismo al espacio, al edificio y su arquitectura como el contenedor principal que marca el estilo.

¿Cómo adaptamos un local a un coworking?

coworking wall
Foto de Cottonbro en Pexels

¡Muy sencillo!, vaciando el espacio, dejándolo al desnudo y descubriendo lo que nos ofrece por sí mismo. Ganar en diseño solo con las paredes crudas y el suelo ya sea de madera o terrazo. Por supuesto, hay que deshacerse de trastos y muebles que no sean útiles, renovando y reutilizando mobiliario. Una simple mano de pintura nos puede ayudar a limpiar las paredes y darles luz.

A la hora de redistribuir el espacio debemos aprovechar al máximo la zona de ventanales y luz natural; deshacernos de las cortinas y colocar en el lugar más luminoso las mesas de trabajo y equipos informáticos (intentando que no reflejen las pantallas). Con ello ahorraremos en consumo eléctrico, daremos más luminosidad a la estancia y tendremos más sensación de amplitud.

Será útil añadir estanterías donde poder organizar los materiales, libros y objetos necesarios para que siempre estén a mano y sean fáciles de encontrar pues el orden y la funcionalidad será algo indispensable.

Espacio para trabajar y sentirse como en casa

Los sofás son a su vez un must, ya que las empresas de tecnología como Google o Facebook han hecho ver que el trabajador también puede y debe relajarse, tomarse un descanso para mejorar el rendimiento. Así pues, añadiremos sofás y butacas donde poder conversar, reunirse o simplemente dejarse caer diez minutos.

Una gran pantalla servirá para presentaciones y poner música ambiental, ayudando a crear un espacio de inmersión y fusión en el cual sentirse a gusto y en sintonía con el espacio y el equipo o personas que allí desarrollan su jornada laboral o reuniones.

coworking cozy space
Foto de Max Vakhtbovych en Pexels

Un coworking estés donde estés

El equilibrio y la concentración son necesarias para llevar a cabo cualquier actividad laboral. Con este estilo industrial se puede utilizar y mejorar cualquier espacio, ya sea una planta baja, un piso alto o una nave, donde poder trabajar y al mismo tiempo crear un entorno acogedor y apacible.

Con RoomBox podréis diseñar una oficina según vuestras necesidades y gustos y ver el resultado final. Esto es muy útil antes de hacer cualquier cambio o reforma en espacios y así quedar satisfechos ahorrando tiempo y evitando problemas, ¡os animamos a probarlo!